Una carretera rural en la provincia de West Sumatra, Indonesia, colapsó tras intensas lluvias e inundaciones, dejando una grieta de hasta 30 metros que impide el paso vehicular. El derrumbe forma parte de una afectación mayor a la infraestructura regional, con decenas de carreteras y puentes dañados. Las autoridades enfrentan el reto de restablecer la conectividad mientras continúan las labores de apoyo a las comunidades afectadas.