De acuerdo con estudios de la Universidad de Arizona y la London School of Hygiene & Tropical Medicine, la superficie de un teléfono celular puede contener hasta diez veces más bacterias que un inodoro. Esto ocurre porque los usuarios lo manipulan constantemente, incluso al comer o en el baño. Entre los microorganismos más comunes se encuentran E. coli y Staphylococcus aureus. Los expertos recomiendan desinfectar el dispositivo a diario con alcohol isopropílico al 70 % y evitar su uso en zonas con alta concentración de gérmenes.