Un terremoto de magnitud 6.7 sacudió el noreste de Taiwán con epicentro frente a la costa de Yilan, provocando intensas vibraciones perceptibles en varias regiones, incluida Taipéi. Aunque no se reportan víctimas ni daños graves, miles de hogares registraron cortes temporales de energía. Las autoridades descartaron riesgo de tsunami y mantienen vigilancia ante posibles réplicas en esta zona de alta actividad sísmica.