Los especialistas en neurociencia explican que revisar una acción repetidamente, como cerrar una puerta o apagar la estufa, es una respuesta a una ansiedad leve de control. Cuando el cerebro no registra bien el recuerdo inmediato, activa la duda como una forma de protección. Este proceso aumenta en situaciones de estrés o inseguridad, creando un ciclo que brinda falsa sensación de seguridad. No es olvido, es la manera en que la mente busca mantener el control y reducir la incertidumbre.