El cansancio social ocurre cuando el cerebro se satura tras múltiples interacciones o estímulos, según la Universidad de Oxford. Este fenómeno, impulsado por el uso excesivo de pantallas y reuniones, genera fatiga emocional y necesidad de aislamiento temporal. Los especialistas recomiendan practicar el “descanso social consciente”, reducir notificaciones y dedicar tiempo a la soledad saludable mediante actividades tranquilas como leer o caminar. No es antisocialidad, sino una forma de autocuidado mental.