La madrugada del 26 de noviembre de 2025, un incendio que arrasó un conjunto habitacional en Wang Fuk Court (distrito Tai Po, Hong Kong), donde ya se han confirmado al menos 151 muertos; la policía detuvo a 13 personas por homicidio culposo tras descubrir materiales peligrosos en las obras de renovación.

El fuego se propagó con rapidez por siete de las ocho torres del complejo residencial, muchas de ellas cubiertas con andamios de bambú y una red plástica que resultó ser altamente inflamable. Luego de rastreos e inspecciones forenses, las autoridades identificaron fallas graves: las redes externas y paneles de espuma adheridos a ventanas no cumplían normas de resistencia al fuego.

Entre los detenidos están directivos de la firma responsable de la construcción y un consultor de ingeniería, acusados de negligencia grave y homicidio involuntario, señalados por autorizar o usar materiales de bajo costo y alto riesgo.

La tragedia es la más mortífera en Hong Kong en décadas. Mientras continúan las labores de búsqueda y rescate, las autoridades anunciaron una investigación independiente para revisar procedimientos de seguridad en obras de rehabilitación y encontrar justicia para las víctimas.

CON INFORMACIÓN DE DOMINIQUE FEMAT

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