Un juez de Los Ángeles impuso una condena histórica de 146 años de vida al productor alegadamente involucrado en la muerte de la modelo Christy Giles y su amiga Hilda Marcela Cabrales-Arzola, tras suministrarles drogas letales en 2021.
En febrero de 2025 un jurado lo declaró culpable por dos homicidios en primer grado relacionados con sobredosis inducidas por fentanilo y GHB que causaron la muerte de Giles, de 24 años, y Cabrales-Arzola, de 26 años. El veredicto también incluyó siete cargos adicionales por agresión sexual entre 2007 y 2021 contra otras víctimas, revelando un patrón de delitos que involucraba fiesta clandestina, sustancias controladas y engaño.
La sentencia se dictó el 29 de octubre de 2025 y el fiscal del condado de Los Ángeles la calificó como “justicia largamente esperada” para las víctimas. La condena a David Brian Pearce representa un paso decisivo en los casos de abuso de poder y explotación en el entorno del entretenimiento. Su sentencia marca un precedente en la persecución de delitos vinculados al uso de drogas mortales en festivos sociales.












