Consumir grandes cantidades de alimentos altos en grasas, azúcares y sal en poco tiempo puede provocar indigestión, acidez, inflamación abdominal y aumento repentino de peso.
Especialistas advierten que estos excesos también afectan la glucosa, el colesterol y la presión arterial, especialmente en personas con enfermedades crónicas. Además, los atracones frecuentes pueden generar culpa, ansiedad y una relación poco saludable con la comida, impactando tanto la salud física como emocional después de las fiestas.
CON INFORMACIÓN DE JACOBO FLORES
¿El ponche de frutas puede ser una bomba de azúcar? Esto dicen expertos