El exceso de calorías, azúcar y grasas hace que el cuerpo se vuelva más eficiente almacenando energía. El problema aparece en enero, cuando esos cambios dificultan bajar los kilos extra incluso comiendo normal.
Además, la inflamación y la retención de líquidos prolongan la sensación de aumento de peso y frustración.
CON INFORMACIÓN DE JACOBO FLORES
¿Y los vehículos? Así luce Aguascalientes sin tráfico HOY 25 de diciembre por Navidad