El artista Ramón Ayala Rodríguez, conocido como Daddy Yankee, enfrentó un proceso judicial para reafirmar su propiedad sobre los derechos del nombre artístico Daddy Yankee y las siglas DY, que estaban implicados en un conflicto legal con su ex-esposa Mireddys González.

Durante el litigio, Daddy Yankee argumentó que cada vez que usaba su nombre artístico, debía compartir ingresos vinculados con esas marcas. Para evitar tener que dividir utilidades, adoptó legalmente el alias DY mientras reclamaba la titularidad absoluta de sus marcas originales.

En un acuerdo con su ex-esposa se resolvieron los derechos corporativos: él asumiría nuevamente el control exclusivo de las compañías El Cartel Records y Los Cangris, lo que le permite gestionar sus marcas sin interferencias.

Este movimiento le devuelve la capacidad de usar Daddy Yankee en proyectos futuros con plena libertad comercial y simbólica, eliminando obstáculos legales que comprometían el uso de su identidad artística.

Con el control recuperado de su nombre y marcas, Daddy Yankee cierra un capítulo legal prolongado y fortalece su autonomía artística, listo para dirigir el legado de su carrera sin restricciones legales.

CON INFORMACIÓN DE DOMINIQUE FEMAT

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