La hepatitis C es una enfermedad viral causada por el virus VHC, reconocida cada 1 de octubre en el Día Internacional de la Hepatitis C. Se transmite principalmente por contacto con sangre infectada, agujas compartidas o transfusiones inseguras. Aunque no existe vacuna, los antivirales de acción directa logran curar más del 95% de los casos detectados. Según la OMS, más de 50 millones de personas viven con esta infección silenciosa, que puede evolucionar hacia cirrosis o cáncer de hígado si no se diagnostica a tiempo. La prevención y detección temprana son fundamentales.