En octubre de 2024, días antes de que tomara protesta como regidora del Ayuntamiento de Aguascalientes, se dio a conocer una orden de inhabilitación por diez años en contra de la morenista Martha Márquez Alvarado. De acuerdo con lo señalado por el Tribunal Administrativo, la sanción derivó de la presunta compra con sobrecosto de despensas durante el periodo 2016-2017, cuando Márquez Alvarado se desempeñaba como titular de la Secretaría de Bienestar y Desarrollo Social, denuncia presentada en su momento por el Órgano Superior de Fiscalización del Estado.

El propio Tribunal Administrativo señaló que quedaba acreditada una falta administrativa grave de abuso de funciones, prevista en el artículo 43 de la Ley de Responsabilidades Administrativas luego de que se diera a conocer la compra de despensas por más de 20 millones de pesos por parte de la Secretaría de Bienestar y Desarrollo Social en 2017, cuando Mártha Márquez era titular de esa dependencia, situación que al día de hoy resuena sobre todo ante las carencias que existen entre algunos sectores de la población.

Josué Guerrero, “Yo lo que veo aquí en nuestro estado es que pues la falta de medicamentos es muy notoria, a veces los hospitales no tienen los insumos que de verdad dicen que se envían…"

Pese a dicha resolución, y a que este era ya el segundo proceso en su contra, Márquez logró asumir el cargo en noviembre de 2024 luego de interponer un recurso legal de amparo. La decisión judicial dejó sin efecto la inhabilitación que le impedía ocupar un puesto público, lo que permitió su nombramiento como regidora del cabildo capitalino, cargo en el que ha protagonizado más disputas e inasistencias a sesiones que apoyos y beneficios para la población de Aguascalientes, quienes señalan su descontento ante situaciones que simplemente no abonan al bienestar social.

Josué Guerrero, "…la corrupción hoy en día en nuestro estado y en nuestro país pues siento que es muy notoria.”

Finalmente, la propia sociedad exige que se busque el bien común más allá de beneficios partidistas, toda vez que la regidora morenista ha buscado por todos los medios y en cada una de las más recientes contiendas electorales un cargo de elección popular, usando la descalificación como bandera política más allá del beneficio de los hidrocálidos y la propuesta real.