Keanu Reeves fue sorprendido por una fanática que intentó entrar a su automóvil después de una función de “Esperando a Godot” en Nueva York. La mujer aseguró ser su “esposa divina”, pero el equipo de seguridad impidió el acceso. El hecho, captado en video, se viralizó en redes sociales y reavivó el debate sobre la seguridad de las celebridades frente a comportamientos obsesivos de algunos admiradores.