La razón de la espuma en el mar de Irlanda no es química ni artificial, sino un fenómeno natural: el oleaje intenso y el viento agitan el agua, que contiene materia orgánica disuelta, como restos de algas, microorganismos y proteínas, y estos compuestos actúan como tensioactivos (similares al jabón), atrapando aire y formando burbujas persistentes.

Cuando hay floraciones de algas, la descomposición de este material libera más de esas sustancias espumantes, lo que favorece la formación de espuma cuando el mar se agita. Aunque visualmente impresionante, esta espuma no es necesariamente peligrosa: suele ser una señal de un ecosistema marino muy activo.

CON INFORMACIÓN DE DOMINIQUE FEMAT

Espuma tóxica inunda calles de Naucalpan tras desbordamiento de presa