El síndrome de auto destilación alcohólica, también llamado síndrome de fermentación intestinal o auto‑brewery syndrome, ocurre cuando microorganismos como levaduras (Saccharomyces cerevisiae, Candida albicans) o bacterias (Klebsiella pneumoniae, E. coli) fermentan carbohidratos en el intestino, generando etanol endógen. Esto provoca síntomas idénticos a una intoxicación etílica (mareos, desorientación, fatiga, pérdida de coordinación o “niebla mental”) sin haber ingerido alcohol.
El diagnóstico requiere pruebas específicas, como una prueba de tolerancia a la glucosa que mida niveles de etanol en sangre o aliento, junto con cultivos fecales y evaluación de microbiota intestinal. El tratamiento combina dieta baja en carbohidratos, antifúngicos o antibióticos según el microorganismo causante, y apoyo con probióticos para restablecer el equilibrio intestinal.
Casos clínicos reportan gran mejoría con manejo dietético estricto y tratamiento médico, aunque es un trastorno muy infrecuente y a menudo infradiagnosticado por su naturaleza poco conocida.
Una condición real y científica que puede simular embriaguez sin beber. Incluso personas sin hábito alcohólico podrían presentar síntomas graves. El reconocimiento temprano y el tratamiento adecuado pueden cambiar su calidad de vida.