La mente humana tiene un sesgo negativo evolutivo. Recordar los errores ayudaba a nuestros antepasados a sobrevivir, evitando repetir acciones peligrosas. Por eso, el cerebro guarda con más fuerza las experiencias dolorosas y los fracasos. Incluso libera más actividad en la corteza cingulada anterior cuando detecta equivocaciones.

Una buena noticia es que puedes entrenarlo: celebrar tus logros con consciencia ayuda a equilibrar ese antiguo instinto de supervivencia emocional.

CON INFORMACIÓN DE JACOBO FLORES

El cerebro humano podría predecir el futuro, revelan nuevas investigaciones