El trayecto ferroviario más largo del mundo conecta Lagos, Portugal, con Singapur en un recorrido de 18,755 kilómetros que dura 21 días. Atraviesa 13 países y ofrece paisajes y culturas diversas. Aunque implica varios transbordos, el costo aproximado de 1,200 euros lo hace comparable con un vuelo, pero con menor impacto ambiental. Es una opción para viajeros que buscan aventura, sostenibilidad y la experiencia única de recorrer medio mundo en tren.